El programa de abonos escolares de Rivadavia es una herramienta con que la comuna beneficia a centenares de estudiantes, con la entrega mensual de pasajes gratuitos en colectivos.
Sin embargo, su manejo administrativo entró en un mar de dudas, luego de que la concejal Analía del Río (Kolina) denunciara en Fiscalía de Estado una serie de irregularidades que habría detectado:“Entre otras cosas, hoy no sabemos lo básico, es decir cuántos beneficiarios tiene el proyecto”, aseguró la edil.
El municipio de Rivadavia entrega mensualmente abonos escolares a alumnos de nivel secundario y universitario.
Se trata de estudiantes que, por lo general, precisan de una ayuda económica para poder viajar y que, tras presentar la documentación necesaria, quedan seleccionados y así, comienzan a recibir el beneficio del municipio, que se extiende a lo largo del año escolar.
“La verdad es que hay poca claridad administrativa en el manejo de este programa y además, muy poco seguimiento de la situación económica de los beneficiarios, al punto en que muchos de los que reciben el abono no lo precisan, y quedan afuera otros que sí”, explicó Del Río.
Según la concejal, las irregularidades detectadas tienen que ver con distintos aspectos del programa: “Hemos analizado su funcionamiento desde marzo, que es cuando comienza el ciclo lectivo, y hay de todo: desde estudiantes que no reconocen como propia la firma que aparece en la planilla de entrega de abonos; nombres de beneficiarios que aparecen por triplicado, pasando por chicos a los que supuestamente les han dado 50 pasajes, pero sólo han recibido 25 e incluso, hay una planilla completa donde, en principio, todas las firmas son falsas”.
A raíz de la denuncia de Analía del Río en Fiscalía de Estado, la comuna decidió hacer su propia investigación del caso: “Hemos iniciado una auditoría interna para establecer si han existido irregularidades en el manejo de los abonos escolares y, mientras esto ocurre, la encargada del programa (Rosana Giacca, subdirectora de Educación) ha sido apartada de ese cargo”, comentó Javier Fornasari, asesor legal de la comuna, quien evitó entrar en detalles: “Vamos a esperar al resultado de la auditoría para saber cuántos beneficiarios hay y si están recibiendo el abono”.
Según Analía del Río, la comuna no tiene en claro cuántos beneficiarios tiene el programa: “Hay meses con 400 beneficiarios y otros con 250 y entonces mucha gente se queda sin sus abonos. Pero más grave aún, según Rosana Giacca, en marzo existían oficialmente 638 beneficiarios de abonos, pero hicimos un segundo pedido de informe y contestaron que eran 327. ¿En qué quedamos?”.
La concejal cuestiona que la entrega del abono se hace sin un seguimiento de cada caso particular: “No está corroborada por la tarea de un trabajador social, que el favorecido es alguien que realmente precisa el abono y más grave todavía, muchos alumnos de los distritos no tiene acceso al abono porque se quedaron afuera del programa”.
Rivadavia invierte en su programa de abonos escolares unos $150.000 mensuales, con picos que superan los $ 200.000. “El programa sigue en marcha y ahora se pide a los beneficiarios que firmen una declaración jurada con la cantidad de abonos recibidos. Pero, incluso así, hay estudiantes que recibieron 20 pasajes pero les pedían que firmaran por 35″, cerró Del Río.