Ya hay 372 denuncias formales por estafa en la Fiscalía de Delitos Económicos. Las mismas son por los fondos que fueron robados de las cuentas de los jubilados y pensionados de la sucursal del Banco Nación de Guaymallén. La estafa, la cual se hacía a través de compras por Mercado Pago, permitió conocer que una de las posibilidades se basa en que se habría filtrado la base de datos de clientes con sus respectivos números de cuentas y datos personales. Así, diferentes personas aprovecharon -no están identificadas- esta situación para hacer compras a nombre de las víctimas. Otro dato importante que se conoció es que dichas compras no se hicieron en Mendoza y sí en diferentes partes de Buenos Aires y en Córdoba.
El jueves de la semana pasada se conoció la información sobre unos allanamientos que se realizaron en el Banco Nación ubicado en las calles Libertad y Bandera de los Andes. Las denuncias por estafa las recibió el fiscal de turno de Delitos Económicos, Flavio D’amore. El letrado, tras recibir en una primera instancia unas 300 presentaciones de jubilados y pensionados, ordenó requisar las oficinas y secuestraron documentación en dicha entidad bancaria (cerca de 1.500 fojas).
Las víctimas explicaron que sus respectivas cuentas fueron vaciadas, es decir, no tenían más plata correspondiente a sus haberes. Desde allí comenzó con la investigación y en las últimas horas se conoció cómo habría sido la mecánica del engaño.
En un principio, explicaron que se habían generado diferentes depósitos a través de la aplicación de Mercado Pago. Esto fue confirmado por una serie de documentación e informes que le llegaron al fiscal del caso. Así, además, pudieron establecer que la mayoría de esos gastos corresponden a compras realizadas.
Si bien no tienen identificadas a las personas que las realizaron, detallaron que las tareas están avanzadas para lograr obtener esos datos. Por otro lado, supieron, que dichas compras por la app se realizaron en diferentes puntos de Buenos Aires: La Plata y Quilmes, entre otras zonas.
Y también hubo registros desde Córdoba. No así desde Mendoza. Por ese motivo entienden que alguien vulneró los sistemas de seguridad del sistema del banco o bien, alguien tuvo acceso a una planilla con los datos de los clientes.
También esa filtración podría ser de afuera del banco, es decir, de los encargados de entregar las tarjetas de crédito o débito a las personas.
En cuanto a las compras, agregaron, que en algunos casos se hicieron hasta tres débitos por tarjeta. Y en otros, más particulares, se realizaron hasta 35 compras diferentes hasta gastar todo el dinero existente.
Ahora, la tarea de los investigadores es detectar e identificar los lugares adonde se realizaron esas transacciones para poder dar con el nombre de la persona que la realizó. Si bien explicaron que es una tarea difícil, casi de «hormiga», no es imposible.
En cuanto a la situación de que las compras se realizaron en otras provincias, podrían pedir colaboración en aquellos lugares. O incluso, en un caso extremo, que sea investigado por autoridades de Buenos Aires o Córdoba, según lo que se desprenda de la causa.