El exintendente interino de Guaymallén está acusado de haber alquilado de modo exprés y discrecional una planta de asfalto. La imputación alcanzó al exsecretario de Obras y a uno de los titulares de la firma investigada.
«Fraude a la administración pública en concurso con malversación de caudales», es la nueva imputación que pesa sobre el exintendente interino de Guaymallén, el peronista Luis Lobos. Deberá dar explicaciones ante la Justicia junto a su exsecretario de Obras Públicas, Federico Sampieri, también imputado.
El exconcejal, que asumió como intendente del departamento más poblado de la provincia cuando Alejandro Abraham partió para el Congreso de la Nación, fue denunciado por haber contratado, de modo exprés y discrecional, una planta de asfalto a la empresa Wanka S.A.
La acusación fue formalizada por el actual intendente de la comuna, el radical Marcelino Iglesias, quien, oportunamente, explicó: «Se trató de un trámite muy exprés, alquilaron una planta asfaltera a la empresa Wanka S.A. Los pagos salieron volando. Eran 1.800.000 pesos por mes y se llegaron a pagar 10 millones de pesos. Hoy, reclaman 5 millones de pesos más, más todo el asfalto que lo tenía que poner el municipio, más empleados y demás… calculamos que, en total, se comprometieron alrededor de 20 millones de pesos y sólo se asfaltaron 28 cuadras». Para dar una idea de la magnitud de la cifra, Iglesias comentó que, en la actualidad, licitó el asfalto de 45 cuadras por sólo 6 millones de pesos, valores de 2016.
Por estos cargos, la Fiscalía Especial nº 6 a cargo de Juan Manuel Bancalari imputó a Lobos bajo la figura de «fraude a la administración pública en concurso con malversación de caudales», debiendo presentarse este miércoles a declarar.
Además, la Justicia notificó como»partícipes sólo de administración» quien en el momento de registrada la contratación (principios de 2015) se desempeñaba como Secretario de Obras Públicas de la comuna. Deberán comparecer, asimismo, Roque Rodolfo Núñez, quien aparecevinculado a la firma Wanka S.A., y el propio Iglesias, en calidad de querellante particular.
Por estas horas, Lobos se encuentra cesanteado en su cargo de director de Servicios Públicos de la comuna, según decreto del propio Iglesias que afectó, también, a su esposa, Claudia Sgró, quien conserva un puesto de planta desde hace unos 20 años.
Ambos, Lobos y Sgró, fueron removidos por: acumular causas judiciales en su contra, falta a los deberes de funcionario público y retención de documentos públicos. En efecto, recientemente el exconcejal presentó su descargo ante la Corte solicitando que se le devuelva a él y a su mujer sus puestos respectivos en Guaymallén.
Hasta aquí, Lobos acumula tres imputaciones en la Fiscalía Especial de Bancalari. En primer lugar, por «fraude a la administración pública» en la causa en la que se lo investiga por una serie decontrataciones irregulares de camiones y maquinarias. En segundo término, fue imputado por «fraude a la administración pública e incumplimiento de funcionario público» aparecía en la lista de personal de la comuna desde 2011, sin haber trabajado en la dependencia ni haber cobrado por las supuestas tareas encomendadas. En tercera instancia, Lobos quedó bajo la mira judicial por el contrato celebrado con Wanka S.A.
En los pasillos de Tribunales insisten con que el exfuncionario tiene un importante prontuario por el que podría terminar preso.
